miércoles, 23 de octubre de 2013

¡Hola amig@s! Ya estamos en pleno ecuador de la semana y para hacerla un poquito más entretenida aquí os dejamos una nueva entrada que nos parece curiosa. A ver que pensáis vosotr@s...¿Esta el español mezclándose demasiado con el inglés? ¿Os parecen excesivos los prestamos lingüísticos entre los dos idiomas? ¿acabaremos todos hablando un nuevo idioma que será un híbrido entre el idioma de Cervantes y el de Shakespeare?. En este articulo publicado en  la Edición Digital del periódico el País hace algún tiempo plantean la cuestión. A ver que opináis vosotros...

"Don Quijote era un friki

El lenguaje futbolístico fue pionero, con el penalti, el córner y el orsai. Luego vinieron el sándwich, el sidecar y el parking. En los años ochenta del siglo XX se empezó a decir que había overbooking cuando un lugar estaba lleno de gente y que alguien estaba missing si no se sabía dónde estaba. Hace mucho tiempo que el castellano toma prestadas palabras del inglés, pero ha sido en la última década —coincidiendo con el desarrollo de Internet, el aumento de los viajes al extranjero y la televisión por satélite— cuando la importación de vocablos de ese idioma ha crecido exponencialmente, sobre todo entre los jóvenes.


En un país como España, donde la mitad de la población desconoce el idioma de William Shakespeare y Victoria Beckham, dejar caer una palabra en inglés aquí y allá parece que nos da un aire moderno, de gente de mundo. Se utiliza la palabra casual (con acento en la primera a) para decir que un atuendo o una cena es informal; trendy para designar un restaurante o un club de moda, o cool para referirnos a algo que nos gusta, que es guay, por utilizar una de las acepciones castellanas ofrecidas por el diccionario Collins inglés-español.

¿Por qué nos parece que todo suena mejor en inglés? ¿Necesita un idioma como el castellano, enriquecido por el paso de los siglos, beber de otras fuentes para ser más preciso, más hermoso o más divertido?

El escritor Antonio Muñoz Molina cree que detrás de este fenómeno hay “una mezcla de pedantería, afán de estar a la moda y complejo de inferioridad cultural”, pero matiza que no conviene ser excesivamente purista con la limpieza del idioma. “Algunas palabras no hay más remedio que usarlas, y no pasa nada por decir software o email”, dice el autor de La noche de los tiempos. “En el inglés se integran con mucha naturalidad palabras de otros idiomas, entre ellos el español. A un idioma sano no le perjudican nada las palabras aisladas que vienen de otros”.

Zac Tobias, profesor de inglés residente en Madrid y autor del blog hablamejoringles.com, cree que utilizar palabras que vienen de otros idiomas tiene “un cierto caché”. Tobias, de nacionalidad estadounidense, subraya que copiar palabras de otras lenguas no es algo exclusivo de los españoles: “Siempre me sorprende la cantidad de palabras inglesas que se utilizan en francés, por ejemplo, y eso pasa desde hace muchísimo tiempo. El inglés siempre ha cogido muchas palabras de otros idiomas, y nosotros tampoco hablamos bien los idiomas extranjeros”.

Para Javier Medina López, profesor de la Universidad de La Laguna y autor de El anglicismo en el español actual (Arco Libros), el influjo económico de los países de la órbita anglosajona es determinante. “Junto con la economía va unido el prestigio social que esa cultura ostenta”, opina. “Los jóvenes hoy, como hace décadas, ven y sienten que hay lenguas de mayor consideración social”.

Carmen Galán, catedrática de Lingüística de la Universidad de Extremadura, piensa también que usar tantas palabras inglesas es sobre todo una cuestión de prestigio. “Disfrazar con un ropaje extranjero los objetos y las acciones les confiere un aura especial de la que carecen las cosas cotidianas”, afirma Galán, quien se toma el asunto con humor: “No es lo mismo una caja de leche que un pack; en un self service la comida es más abundante y, además, se puede repetir; y los kilos de más se resuelven rápidamente si se consume comida light, se practica jogging o footing o se visita con regularidad un sport center donde se pueda ejercitar algo de body fitness, gym-jazz o heavy dance, aunque el step que nos martiriza a golpe de música de chiringuito no sea más que un vulgar escalón de plástico y la danza del demonio no pase de una agitación frenética de carnes poco prietas”.

En muchas ocasiones, la adopción de una palabra inglesa trae consigo curiosas mutaciones. Vocablos como friki (freaky, en inglés) pasan de ser un adjetivo en su idioma original a ser un sustantivo en español, utilizado para señalar a una “persona pintoresca y extravagante”, según una de las definiciones incluidas hace apenas unos días por la Real Academia Española a la versión digital de su diccionario. “Ese tío es un friki”, se dice. O al revés: un nombre común como fashion (moda) se transforma en adjetivo para describir a alguien que viste a la última: “es una chica muy fashion. O mejor todavía: “es superfashion”. Con frecuencia, las palabras en inglés se convierten en eufemismos: suena mejor (es más cool) ser single que ser soltero, comprar ropa vintage que ropa usada, o formar parte del staff que de la plantilla de una empresa. Y no digamos volar en una low cost que en una línea aérea barata, o pagar cash en lugar de en efectivo.

Javier Medina, de la Universidad de La Laguna, cree que en un mundo tan cambiante y oscilante en cuanto a viajes, trabajos, culturas e intercambios inmediatos de información, poca gente se plantea si es correcto o no utilizar una voz puramente española. “La cuestión de la conciencia lingüística es clave en este asunto, y las actitudes hacia la lengua también. Los jóvenes tienen modelos, iconos, que muchas veces hablan, piensan y se mueven en inglés. Es natural la mímesis”.

Carmen Galán dice que usando palabras inglesas los españoles simulamos estar integrados en la Europa multilingüe. “Tenemos el toque, el traje idiomático, pero el interior está poco aireado”, afirma. “No me creo el tópico de ‘a mí se me dan muy mal los idiomas’ que utilizan muchos españoles, puesto que no es posible que los jóvenes estén aprendiendo inglés desde pequeños y apenas farfullen cuatro palabras. Tenemos un inglés gramatical que no ponemos en práctica porque evitamos las situaciones que lo requieren”.

La supremacía de los países de habla inglesa en el terreno de las comunicaciones, la tecnología y la ciencia también es un factor mencionado por los expertos. Zac Tobias recuerda la gran cantidad de conceptos y productos nuevos que nos llegan constantemente del mundo anglohablante. En ocasiones, dice el profesor de inglés, las palabras inglesas expresan mucho con poco y por eso se adoptan con facilidad. “Es mucho más fácil decir email que correo electrónico. Me imagino que hay una palabra española para smartphone, ¿pero quién la conoce?”.

El uso de palabras inglesas es especialmente paradójico en España por ser cuna de una de las lenguas más habladas en el mundo y porque su población es de las que peor habla idiomas extranjeros. Según Eurostat, la mitad de los españoles reconoce no hablar una lengua foránea. Y de los países europeos incluidos en el índice Education First (EF), España e Italia son los únicos que suspenden en inglés.

Muñoz Molina culpa del mal inglés de los españoles al doblaje de películas, “esa calamidad cultural en la que somos especialistas”. Para el escritor, el doblaje hace a la lengua española un daño mucho más grave que cualquier palabra extranjera. “Por no hablar de muchas traducciones, que están hechas a toda prisa por gente mal pagada que no domina el inglés, y que por lo tanto cae continuamente en lo que se llaman falsos amigos y en calcos sintácticos”.

Zac Tobias está de acuerdo: “En los medios de comunicación españoles apenas se oyen idiomas extranjeros. Incluso las entrevistas y discursos de jefes de Estado de otros países están doblados. Ahora por lo menos se puede elegir el idioma de muchas películas y series en la tele, pero por defecto casi todos están en español, y la mayoría de los españoles están acostumbrados al doblaje y lo prefieren a los subtítulos. Al final, se oye poquísimo inglés en España, y creo que este es uno de los factores más importantes”.

En busca de una explicación, Javier Medina se remonta a los tiempos del aislamiento de España, la época en la que, dice, parecía que ser español significaba renunciar a todo aquello que tuviera un tinte sospechosamente extranjero. “Y en ello se incluía la lengua. Ahora que la TDT ofrece la posibilidad de ver películas en versión original, me gustaría saber cuántos españoles ponen la versión en inglés, con o sin subtítulos. Seguro que muy pocos”.

Tobias señala con el dedo a otro culpable: el sistema educativo. “En las clases de inglés se suele dar demasiada importancia a hacer ejercicios por escrito, y demasiada poca a la pronunciación y la comunicación oral”, dice. “La mayoría de mis alumnos tuvieron profesores que no dominaban el idioma y que les transmitieron sus propios errores. Estos se convierten en vicios que son muy difíciles de quitar. Los profesores de inglés nativos en España pasamos la mayoría de nuestro tiempo intentando corregir este tipo de errores”.

Errores, también, como el de otorgar a palabras castellanas el significado que tienen palabras similares en inglés. Es el caso de bizarro (en inglés, bizzare), que se usa con frecuencia para designar algo extraño, fuera de lo común. Según la RAE, bizarro significa valiente, esforzado, generoso, lucido, espléndido…, pero nunca raro. Especialmente llamativos son los híbridos made in Spain, que mezclan el castellano y el inglés para fabricar una nueva palabra. Es el caso de puenting o vending, ya integradas en las jergas del deporte y la economía, respectivamente. Hay quien incluso habla de hoteling, compring o tumbing.

El uso de palabras inglesas es cada vez más frecuente en la calle, pero también en los medios de comunicación. Casi todas las palabras antes mencionadas han aparecido en los últimos meses en EL PAÍS. “Un friki la fuerza”, rezaba un titular de la sección de Madrid. El suplemento El Viajero publicaba bajo la frase “Un brunch de lo más cool” una reseña sobre la mezcla de desayuno (breakfast) y almuerzo (lunch) que ofrece un hotel madrileño. “Del menú trendy al sabor Matisse” era la frase que encabezaba un reportaje sobre los restaurantes de los museos madrileños en las páginas de información local. Un blog de este periódico sobre la afición a la bicicleta se llama I love bicis.

¿Qué pueden hacer los medios de comunicación para parar esta invasión y preservar el idioma? Muñoz Molina recomienda algo sencillo: “Poner cuidado. Editar. Corregir. Tratar el oficio de la traducción con el respeto que merece. Y comprobar nombres y palabras extranjeros, no solo en inglés, antes de publicarlos. Es asombroso el número de veces que se escriben mal nombres y palabras muy comunes de otros idiomas. Con lo sencillo que es ahora, con Google”.

¿Acabaremos todos —españoles, franceses, italianos, rusos…— hablando un híbrido de nuestros respectivos idiomas y el inglés? Javier Medina no cree que exista degeneración de la lengua. “Hablar de degeneración implica que existe un modelo perfecto que se degrada porque recibe otro, o lo deja entrar en su sistema”, señala el profesor de la Universidad de La Laguna. “¿No permitió el español antiguo entrar en su estructura palabras árabes, italianas, francesas, americanas...? ¿Se degeneró por ello o se enriqueció? Ahí está la cuestión. Los hablantes eligen aquello que mejor les venga para los fines que tiene una lengua: la comunicación”.

Carmen Galán opta por el pragmatismo: “No nos queda más remedio que aceptar el nuevo léxico si no queremos parecer desfasados, offline, out”."

Articulo aparecido en la edición digital del periódico El Pais
( http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/06/30/actualidad/1341076170_935785.html)

lunes, 21 de octubre de 2013

¡Feliz lunes amig@s! Para comenzar bien la semana y mantener nuestros buenos propósitos, aquí os dejamos un nuevo artículo que os puede resultar interesante. Se publico este pasado sábado en la Edición Digital del periódico el País y pensamos que os puede gustar leerlo. Es divertido y os ayudará a ver que el español es una lengua muy rica y que esta en continuo cambio y evolución. A ver que os parece....

"Un Atlas sonoro del español en el VI Congreso de la Lengua, en Panamá

Lo chévere del idioma español es su espíritu patiperro que le permite ser entendido por el 80% de sus cuates. Sus casi 500 millones de hablantes no tienen que bregar en medio del bochinche de otras lenguas, a pesar de lo que digan los engreídos jailones y sin necesidad de huachafiar. Eso sí, a riesgo de que alguno pueda parecer un boludo al no entender las yapas de un idioma que no se cansa de decir asere a las expresiones que van apareciendo. Así surge una especie de parqueadero infinito donde caben desde vocablos curuvicas o cipotes, hasta otros pinches o mensos, que alguien podría interpretar como un contradiós. Pero es un idioma que no está en la olla porque sus palabras se sienten tuanis y rumbean sin complejos de ninguna vaina.

La anterior es una muestra de una lengua polifónica, policéntrica y en expansión, de cuya riqueza y preocupaciones hablarán desde hoy y hasta el miércoles más de 200 expertos en el VI Congreso Internacional de la Lengua Española en Ciudad de Panamá. Como un homenaje a ella y a su diversidad, EL PAÍS ha pedido a 20 escritores del mundo hispanohablante, más Estados Unidos, que den el pie para crear un Atlas sonoro de las palabras más autóctonas del español. Narradores, poetas y ensayistas han elegido el vocablo que consideran que refleja mejor su país para que los internautas continúen con sus propuestas en el blog Papeles perdidos.

Este Atlas sonoro coincide con la presentación en Panamá de la edición digital del Diccionario de Americanismos, publicado por la RAE y la Asociación de las 22 Academias de la Lengua, a cargo del académico Humberto López. Un libro cuya consulta está disponible gratuitamente en la Red y que contiene más de 70.000 entradas y unas 120.000 acepciones, sinónimos y variantes guapas y nada pendejas.

Shhh... Así suena el Atlas en palabras de los 21 escritores:

Argentina: BOLUDO
Juan Gelman. Es un término muy popular y dueño de una gran ambivalencia hoy. Entraña la referencia a una persona tonta, estúpida o idiota; pero no siempre implica esa connotación de insulto o despectiva. En los últimos años me ha sorprendido la acepción o su empleo entre amigos, casi como un comodín de complicidad. Ha venido perdiendo el sentido insultante. Ha mutado a un lado más desenfadado, pero sin perder su origen.

Bolivia: JAILÓN
Edmundo Paz Soldán. Es alguien de la high society, y la connotación suele ser negativa. Los jailones viajan a Miami o Punta Cana de vacaciones y solo van a los bares de moda. Los jailones no entienden Bolivia porque son... jailones. Se llevarían bien con los fresas mexicanos o los chetos argentinos.

Chile: PATIPERRO
Antonio Skármeta. Los chilenos tenemos patas de perro. Abandonamos nuestros lares con frecuencia tras vagas ensoñaciones o por apremiantes necesidades que nos impulsan a dejar el país. Encerrados en una tierra estrecha entre el mar y la cordillera de los Andes queremos romper límites, curiosear. El patiperreo con el lenguaje nos ha dado grandes poetas.

Colombia: VAINA
Laura Restrepo. Colombianísimo es el uso indiscriminado de la palabra vaina, comodín universal que para todo sirve. Exclamamos “¡qué vaina!” cuando se trata de un desastre, y “¡qué buena vaina!” para referirnos a un triunfo e incluso a la salvación. Para precisar su extenso significado, suele utilizarse precedida por el pronombre demostrativo esa: “Pásame esa vaina”, decimos señalando con el índice, y podemos estar pidiendo desde una aguja hasta un elefante. “Ya salí de esa vaina” alude a cualquier alivio. Al extranjero que visite estas tierras, familiarizarse con el múltiple y versátil manejo de vaina le ahorra tener que aprender español. En cuanto a amplitud de cobertura, vaina solo es equiparable al omnímodo mierda (v. gr. “queda en la mierda”; “se me perdió esa mierda”; “qué es esta mierda”). El cosmos entero cabe en vaina, es el Alfa y el Omega; Vaina es el Aleph.

Costa Rica: TUANIS
Carlos Cortés. No viene de too nice, como machaca el cómico mexicano Adal Ramones cuando nos imita, sino de la jerga militar del salvadoreño Malespín en el siglo XIX. Al sustituir la e por la a y la o por la i se crean tuani (bueno), peli (malo) y muchas más. El uso le añadió la s. ¿Todo tuanis? (como pregunta y afirmación) ¿Tuanis o agüevado? (como lema). Tuanis es todo y nada.

Cuba: ASERE
Wendy Guerra. En la colección de cubanismos acopiados por Argelio Santiesteban se asienta esta palabra como originaria de África, especialmente de la religión carabalí. Algunos dicen que significa “yo te saludo”, otros dicen que en lucumí significa loco, pero lo cierto es que la nueva generación de cubanos refiere a asere y “asere que bolá” como el saludo más popular y común que ya nos distingue en el mundo.

Ecuador: YAPA
Gabriela Alemán. La yapa es algo adicional, un regalo. Cuando tenía diez años en todas las panaderías de Quito se daba una yapa a los clientes habituales, eran uno o dos panes que establecían un pacto de amistad. En uno de esos viajes de ida y vuelta la yapa llegó, en época de la colonia y a través de Louisiana, al inglés como lagniappe. Enchufe TV, canal en youtube de humor ecuatoriano, ha devuelto a la yapa al día a día de los ecuatorianos con sus microyapas semanales. Aquí una de ellas.

El Salvador: CIPOTE
Horacio Castellanos Moya. Palabra de uso común sinónimo de niño, joven, adulto inmaduro. Es exclusiva de El Salvador, donde no se le asigna ninguno de los significados castizos (hombre grueso o torpe, miembro viril). Nunca se entendería en El Salvador, por ejemplo, la frase “se le templó el cipote”. Un clásico de la literatura salvadoreña, Cuentos de cipotes, de Salarrué, relata historias de niños. Y a nadie se le ocurriría en el país relacionarlo con Los once mil falos, de Apollinaire.

España: CONTRADIÓS
Álvaro Pombo. Es un coloquialismo español que se usa para designar un disparate (una cosa absurda o contraria a la razón). Francisco Umbral, en El Mundo (23-4-90): “Una democracia capitalista es un imposible metafísico, un contradiós”. Otro ejemplo, de mi cosecha: “¡Entrar en casa con los tenis embarrados es un contradiós!” (dicho por una madre cabreada). Me parece una expresión esencialmente española, una mezcla de teología y falta de lógica: se pone a Dios (que es la contradicción absoluta) como análogo de la razón o el sentido común. Dios y las cosas divinas y católicas están grabadas a fuego en nuestro léxico y en nuestros usos lingüísticos.

Estados Unidos: PARQUEADERO
Sergio de la Pava. Nuestra palabra tiene su origen sospechoso en el spanglish o, mejor, el espanglish. Los idiomas son herramientas de los humanos no al reverso, así que si toca combinarlos para ser entendido con rapidez, como frecuentemente le toca al inmigrante, pues así crecen nuestras raíces. Solo cuida, cuando estés parqueando el carro, que no te den un ticket.

Guatemala: KAIBIL
Rodrigo Rey Rosa. En 1974 se puso en circulación esta palabra de origen maya-mam, kaibil, para designar un tipo de comandos especiales que combatieron en la guerra contraguerrillas en Guatemala, los que se hicieron notorios por su crueldad extrema y porque participaron en numerosos actos de genocidio. Kaibil aparece casi a diario en la prensa guatemalteca, se usa tanto en relatos y novelas como en poemas y ensayos y películas documentales.

Honduras: PIJA
María Eugenia Ramos. La palabra pija (denominación del pene) y sus derivados tienen tantas y tan diversas acepciones en el habla hondureña que se ha convertido en parte de nuestra identidad. Es una palabra pijuda, es decir, muy buena, porque con ella expresamos desde entusiasmo a la indiferencia, pasando por el enojo y estados alterados de conciencia. Se usa como sustantivo, verbo y adjetivo. “Me voy a la pija” significa me voy lejos. “Me vale pija”, no me importa; “estar a pija”, estar furioso, pero también estar borracho; pijinear, irse de fiesta, de parranda. Ser pijudo o pijuda es ser una buena persona o algo muy bien hecho.

México: PINCHE
José Emilio Pacheco. En México, pinche canceló su acepción normal para adquirir, no se sabe cuándo, las características de un epíteto derogatorio que sorprende por su omnipresencia y durabilidad. Pinche puede ser un empleado, el hábito de fumar, la suerte, un policía, una camisa, un perro, una casa, una persona, el mundo entero, una comida, un regalo, un sueldo o bien lo que a usted se le ocurra. Se trata, pues, de un epíteto que degrada todo lo que toca. Normaliza y vuelve aceptable una furia sin límites contra algo que nos ofende y humilla pero no podemos cambiar.

Nicaragua: CHUNCHE
Sergio Ramírez. Un chunche es una cosa y cualquier cosa, un comodín que salta sin descanso, mueble, aparato, herramienta, vehículo. “Montarse en un chunche”, “pásame ese chunche, “quitá de allí ese chunche”..., jamás se aparta de la boca y también es el sexo de una mujer, chunchito, o su admirado trasero: “Qué soberano chunche”.

Panamá: SINVERGÜENZURA
Carlos Wynter Melo. Sinvergüenzura es el sustantivo de la infinitud y, en consecuencia, de la libertad absoluta. Una sinvergüenzura es comerse el mundo de un bocado. Es un escape —a veces son inmorales las reglas morales— o el motivo de que exclames de repente, porque te nació de las vísceras: “¡Qué sinvergüenzura!”, para quejarte o decir, oye, es asombroso que los humanoides seamos inmensos.

Paraguay: CURUVICA
José Pérez Reyes. De origen guaraní con sufijo español, se trata del pequeñísimo fragmento resultante de la trituración algún material sólido. Como un párrafo desprendido de una obra. Viene al caso porque los escritores por ejemplo, juntamos palabras como curuvicas y de esa suma de restos sale un texto.

Perú: HUACHAFO
Iván Thays. Aunque se considera un sinónimo de cursi, su significado es más amplio y va de lo gramatical a lo sociológico. La huachafería es imitar o pretender ser lo que no es. Además, está relacionado a lo ostentoso, falta imperdonable en un país donde se sobrestima el perfil bajo. Su uso es tan subjetivo que resulta incluso huachafo el andar señalando las huachaferías de los demás.

Puerto Rico: BREGAR
Mayra Santos-Febres. Yo brego, tu bregas, estamos bregando; “¡chico, brega bien!”. Me imagino que la ubicuidad de la palabra explica todo un modo de vida. Hay que bregar mucho para vivir en Puerto Rico. Hay que estar dispuesto a negociar, resolver, esquivar e inventar soluciones nuevas casi cada día. Vivimos, como dice nuestro gran ensayista Arcadio Díaz, del arte de bregar.

República Dominicana: OLLA
Rita Indiana Hernández. La olla es un lugar caliente y letal, pequeño infierno donde terminan los desempleados, viven los pobres y al que hacen referencia constante los de la clase media. El que dice toy en la olla o toy en olla está quebrado, desbaratao, sin un chele. La olla es también un adjetivo, una obra de arte al igual que el discurso de un político puede ser o estar olla (horrible, pobre, ridículo). La isla es una olla adentro de otra. ¡Quéolla!

Uruguay: CELESTE
Claudia Amengual. Algún distraído diría que el término celeste proviene de la camiseta de la selección de fútbol, pero lo cierto es que esta lo toma de nuestra bandera. De ahí derivan expresiones como “la celeste” o “soy celeste” que han enriquecido el significado y lo han transformado en una marca de la identidad nacional uruguaya.

Venezuela: BOCHINCHE
Rafael Cadenas. No es propiamente un venezolanismo, pero es “voz de origen americano”, según asienta Francisco Javier Pérez en su Diccionario Histórico del Español de Venezuela y añade que es “una de las voces más expresivas del español”. Inicialmente, solo tuvo el sentido de fiesta escandalosa, luego significó desorden, alboroto, tumulto, después pasó al ámbito político. Francisco de Miranda la hizo célebre cuando al ser derrotado, al comienzo de la guerra de independencia, exclamó sobre su tropa: “Bochinche, bochinche, esta gente no es capaz sino de bochinche”. Y bochinchero se aplica a alguien irresponsable, falto de seriedad.

Y eso es lo que no quiere ser la lengua española. Las palabras propuestas por estos 21 escritores lo confirman como un idioma pijudísimo, que no es cualquier chunche porque sirve, entre otras cosas, para platicar hasta convertirse en una marca igual que la celeste. ¡Genial sinvergüenzura! Ahora, la palabra la tienen ustedes con sus propuestas para completar este Atlas sonoro de las palabras más autóctonas del español. ...Shhh! no digas tu palabra, escríbela AQUÍ..."

Articulo aparecido en la edición digital del periódico El Pais (http://cultura.elpais.com/cultura/2013/10/16/actualidad/1381922983_646942.html)

viernes, 18 de octubre de 2013


¡Hola de nuevo amig@s! Y para predicar con el ejemplo, aquí va la primera entrada en nuestro Blog del curso académico 2013/14. Se trata de un reportaje publicado en la Edición Digital del periódico El País el pasado 16 de Octubre. Esperamos que lo consideréis tan interesante como nosotros...



"Puerto Rico aspira a ser la sede del Congreso de la Lengua en 2016

Este año desde Panamá, en el 2016 desde: ¿Puerto Rico? La isla caribeña aspira a ser la anfitriona del VII Congreso Internacional de la Lengua Española. Así lo ha hecho oficial Alejandro J. García Padilla, gobernador del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, en una carta a Víctor García de la Concha, director del Instituto Cervantes; y José Manuel Blecua, director de la Real Academia de España. El tema sería el español en contacto con otros idiomas en un momento de gran expansión tanto en el número de hablantes como en su uso en Internet.

La intención del gobierno puertorriqueño es que esas dos instituciones, más la Asociación de Academias de la Lengua , que son las que deciden la nueva sede, estudien su ofrecimiento durante el Congreso de Panamá que se realizará del 20 al 23 de octubre. Ellos estudiarán la propuesta puertorriqueña y otras en caso de haberlas.

Las conversaciones de Puerto Rico para celebrar el VII Congreso de la Lengua empezaron en julio con la venia de la Academia Puertorriqueña de la Lengua. Y Ahora se formalizan. En un pasaje de la carta el Gobernador dice: “Nos honra saber que ambas instituciones (RAE y Cervantes) ven nuestro ofrecimiento con muy buenos ojos y que hayan expresamente deseado mantener el criterio de periodicidad entre congresos, a fin de que el próximo pueda organizarse en esa fecha en nuestro país”. Puerto Rico asumiría todo el presupuesto que requiera el encuentro, calculado en unos 2.6 millones de euros, como ha hecho Panamá en esta edición. “Es afortunado que el gobierno de Puerto Rico esté dispuesto a embarcarse en esta magnífica empresa”, asegura José Luis Vega, director de la Academia Puertorriqueña. Puerto Rico ya ha creado una oficina que se encargará de todo y cuyos responsables viajarán a Panamá este fin de semana para tomar nota de cómo se realiza un certamen de esta naturaleza.

El tema que propondrá Puerto Rico será el español en contacto y relación con otros idiomas. Precisamente ellos que son una puerta de vaivén entre el castellano y el inglés, especialmente, sin olvidar el entorno caribeño donde está el francés o el creole. Punto de encuentro del contacto de varias lenguas pero donde el español sale victorioso, a pesar de que el inglés también es idioma oficial y el dólar la moneda. Antes de 2050, Estados Unidos podría convertirse en el país con más hispanohablantes del mundo.

La polinización y mezcla mutua de estos dos idiomas es uno de los temas más analizados y estudiados por los expertos, no solo por el rápido crecimiento del castellano en Estados Unidos por parte de la comunidad de origen hispanohablante , sino también como segunda lengua estudiada y por su crecimiento en el resto del mundo. En el 2030, solo el chino mandarín superará al español en número de hablantes nativos, y el español ya es la tercera lengua más usada en Internet.


Así, el periplo de los estudios y análisis del español continúan, tras una ruta iniciada en 1997 en Zacatecas (México), y seguida en Valladolid (España), Rosario (Argentina), Cartagena de Indias (Colombia), Valparaíso (Chile) que no se pudo celebrar por el terremoto, y Ciudad de Panamá (Panamá)."

Articulo aparecido en la edición digital del periódico El Pais (http://cultura.elpais.com/cultura/2013/10/16/actualidad/1381922983_646942.html)
¡Hola de nuevo amig@s! Saludos desde España! Con motivo del inicio del nuevo curso escolar y tras el rotundo éxito de nuestros programas este pasado año, nos proponemos retomar la actividad de nuestro Blog con ilusión renovada y muchas ganas. 

Nuestra aspiración es convertirlo en una herramienta viva, útil e interesante. Y nuestro objetivo no es otro que acercaros a la lengua y cultura española de una forma entretenida e interesante.

Esperamos que nos acompañéis en este viaje y que nos ayudéis de forma activa a darle forma. ¡Bienvenido y adelante...! Comienza un nuevo año escolar ilusionante y lleno de oportunidades. ¡ACOMPÁÑANOS!